A partir de hoy y hasta el domingo será suspendido el servicio de pasajeros en el tramo elevado de la línea uno del Metro hacia Santo Domingo Norte, con miras a realizar ajustes técnicos para la puesta en servicio de trenes con seis vagones en las horas de mayor flujo de pasajeros.
El anuncio ha causado preocupación en usuarios del sistema ferroviario, debido a que prevén se pueden producir trastornos para llegar a sus destinos, a pesar de que la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (Opret) informó que autobuses de la Oficina Metropolitana de Autobuses (OMSA) estarán disponibles.
Algunos usuarios como Andrés Cleto, mostró preocupación por las dificultades que prevé para miles de pasajeros que buscan asientos temprano para llegar a sus puestos de trabajo, estudios, clínicas, hospitales y otras diligencias.
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En tanto que, Andrea Muñoz, quien habita en la avenida Jacobo Majluta, consideró que se produciría un “pandemonium” para salir de Santo Domingo Norte, debido a que habrá más vehículos en las calles, por tanto, más tapones.
En cambio, Johana Pimentel cree que podría producir serios problemas para salir de ese municipio, porque los autobuses de la OMSA no darían abasto para los miles de pasajeros que diariamente abordan el metro.
La Opret informó que a partir de agosto entrarán en operación los nuevos trenes de seis vagones en las líneas 1 y 2 del Metro de Santo Domingo, pero que en la parte elevada hay que realizar algunos ajustes antes.
El director de la Opret, Rafael Santos Pérez, manifestó que ese importante hito marca la culminación de un ambicioso proceso de ampliación de capacidad, que permitirá ofrecer un servicio más ágil, espacioso y confortable a los cientos de miles de pasajeros que utilizan el metro cada día.
Esa incorporación representa la duplicación del número de vagones por tren, -al pasar de tres a seis.
