Irrumpió en la escena humorística y rápidamente el público aceptó su trabajo. Fue creciendo frente a las cámaras y, como una cara nueva y fresca del humor dominicano, el público le fue otorgando su voto de confianza.
Paso a paso, el humorista Daniel Luciano se fue convirtiendo en una figura de la que se tiene que hablar cuando de humor se trata.