Estados Unidos impuso el lunes sanciones a los dos hijos fugitivos del encarcelado líder del Cártel de Sinaloa mexicano, Joaquín “El Chapo” Guzmán, y anunció una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que conduzca al arresto o condena de los hombres.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció sanciones contra Archivaldo Iván Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, quienes se cree que actualmente se encuentran en México.
Los otros hijos de Guzmán, Joaquín Guzmán López y Ovidio Guzmán López, están actualmente encarcelados en Estados Unidos. En mayo, los fiscales federales anunciaron que no buscarán la pena de muerte para Joaquín Guzmán López si es condenado por múltiples cargos en Chicago.
También se impusieron sanciones a una facción del Cártel de Sinaloa conocida como los “Chapitos”, que ha sido identificada como uno de los principales exportadores de fentanilo a Estados Unidos, así como a una red regional de asociados y negocios de los Chapitos con sede en Mazatlán, México, que supuestamente se dedican al narcotráfico, la extorsión y el lavado de dinero.